Las tribus están de moda
ARQUITECTURAMEDIO AMBIENTE
A pesar de que el sistema nos aboque a una sociedad cada vez más individualista, hay muchas corrientes que afirman que, aunque internet y la tecnificación de nuestro entorno nos lo pongan difícil, necesitamos a los demás más que nunca.
La base de la arquitectura es responder a las necesidades sociales, así que el boom del co-housing no se ha hecho esperar. Y se ha vuelto cada vez más visible en España aun cuando el norte de Europa lleva practicando el arte de vivir en comunidad desde los años 70 aproximadamente.
Un co-housing puede entenderse de forma tan sencilla como esa, vivir en una pequeña sociedad y ser co-responsable del espacio construido compartido. En Dinamarca es una forma de vida totalmente asimilada y cada vez más practicada, aunque siguen siendo las personas mayores sus principales usuarias.
"Nunca los valores perdidos del barrio que conocieron
nuestros abuelos pudieron contenerse
en un espacio así de reducido, donde recuperar
los cuidados y reconstruir lo común"
Y no se trata de ser compañeras de piso. Un co-housing consiste en hacerse cargo de los espacios comunitarios como salas de estar, huerto, cocina, salas multifuncionales, áreas exteriores… a la vez que tu espacio privado y de descanso se mantiene separado del resto. De esta forma una familia con hijos pequeños puede conciliar trabajo y vida personal porque en el edificio hay personas jubiladas; la organización de las comidas permite ahorrar en la cesta de la compra, probar recetas nuevas y repartirse las tareas; los grandes electrodomésticos o incluso los vehículos de transporte, se vuelven más eficientes porque más gente hace uso de ellos y su mantenimiento es compartido.
Hay enormes ventajas en esta forma de vida consecuente y coherente con la situación actual global, pero no muchos estamos dispuestos a desprendernos de “lo que consideramos nuestro” en pos de hacer un uso más consciente de los recursos de los que disponemos.
En España ya está pasando, el colectivo Entrepatios Las Carolinas es el primer co-housing ecológico en Madrid y en Galicia, desde Ecohousing Salud, han lanzado en Sanxenxo un proyecto similar dirigido a mayores de 60 años.
Personas proactivas que quieren crear otro modelo de vivienda y se comprometen a desarrollar nuevas estructuras de comunidad dentro de la sociedad.
Una idea transformadora, una idea para el ahora. Co-housing.
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La Voz de Galicia: lee el artículo aquí
Asociarse es un derecho para trabajar en favor de nuestros intereses. Actuar conjuntamente frente a problemas comunes ayuda no solo a establecer lazos más fuertes sino a respetar todas las voces.
Accediendo a una vivienda compartida, no solo se participa con la ayuda mutua, la cooperación o la conciliación familiar y laboral de sus participantes, sino que se fomenta la interacción social. Respetar el poder de decisión común, manteniendo pequeñas parcelas de privacidad que son muy necesarias en el desarrollo individual de cada uno.
